Hemos incorporado a la sección de Archivos sonoros del portal SIPCA el trabajo “Recopilación de tradición oral en el Parque Cultural de San Juan de la Peña. Fase 2”, realizado en 2007-2008 por las investigadoras Sandra Araguás y Nereida Torrijos...
Se trata de una pequeña iglesia construida en el reducido núcleo de Santa Cruz de la Serós en torno a 1020-1030, bajo el reinado de Sancho III el Mayor, dentro del contexto de repoblación y reconstrucción que tuvo lugar durante la primera mitad del siglo XI en el Alto Aragón. Las primeras noticias documentales (1061 y 1084) dan información sobre su ubicación en un lugar de propiedad real. En texto de 1089 se recoge la concesión de San Caprasio por parte de Sancho Ramírez a San Juan de la Peña. Es un edificio de nave única y ábside semicircular orientado al este, construido en sillar de mediano tamaño tallado a maza y colocado a soga. Sus muros son gruesos y presentan únicamente tres ventanas de medio punto con doble derrame en el hemiciclo absidial y dos en el muro meridional, todas cubiertas con bóvedas capialzadas, estando cegado el único vano existente en el muro occidental, de perfil cruciforme. La nave única se divide mediante un arco fajón de medio punto apoyado en pilastras de triple esquina en dos tramos desiguales, cada uno de los cuales se cubre con una bóveda de arista hecha de lajas. Un pequeño presbiterio de planta trapezoidal y cubierto con bóveda de cañón da paso al ábside semicircular cubierto con una bóveda de cuarto de esfera realizada a base de hiladas concéntricas de sillarejo. Los paramentos exteriores se decoran con lesenas y dos arquillos ciegos por banda, de forma que hay siete lesenas en cada uno de los dos lados mayores, cinco en la cabecera y tres a los pies, estando estos últimos dispuestos asimétricamente para acomodarse a la puerta de ingreso y a la cubierta a dos vertientes que protege la construcción. El ingreso, en el muro occidental, ligeramente descentrado, es adintelado y está cobijado por un arco de medio punto, tanto al exterior como al interior. Sobre el presbiterio y parte del primer tramo se alza una sencilla torre campanario de planta cuadrada y un único cuerpo, con ventanas geminadas en tres de sus frentes y otra sencilla en el frente occidental. Se cubre con tejado a cuatro vertientes y fue construida en el siglo XII, con posterioridad a la iglesia.
En las viviendas populares más antiguas, fechadas entre los siglos XIV y XVII, llama la atención la proliferación de elementos defensivos como las aspilleras, matacanes y, muy especialmente, grandes torreones. En nuestra comunidad autónoma contamos con más de un centenar de casas torreadas, que fueron declaradas BIC por el Gobierno de Aragón, localizadas en las sierras orientales turolenses y en el Pirineo y prepirineo altoaragoneses. Ambos conjuntos presentan grandes diferencias. Recorremos las torres turolenses, construidas en la baja Edad Media para proteger las masías dispersas y atestiguar también la prosperidad de sus propietarios.
Jesús Vázquez ObradorSabiñánigo, Comarca del Alto Gállego, 2002